¡Feliz Noche de Navidad!
Otra navidad ha llegado a nuestras vidas amigas queridas, donde cielo, tierra, sol y mar al unísono, vibran en armonía con la naturaleza y su riquísima aroma a pino verde, a escarcha de nieve, a musgo concentrado, cómplice del rocío del anochecer, el aroma a ponche caliente y buñuelitos caseros, la cena exquisita de navidad, el calor del hogar y la familia, el nacimiento, las luces de colores, el árbol encendido al pié del amanecer, de donde acostumbramos colgar nuestros más preciados sueños que son como regalos que Dios nos ha dado en una noche tan especial en la que hace ya muchos años nació un niñito en un establo.
Este Divino Niño es Dios, y María su madre, le puso por nombre JESUS, que encarnado aquí en la tierra, trajo bajo su brazo una promesa inmortal para la humanidad: La del amor, el perdón, la esperanza y la vida eterna, y es a nosotros a quien nos corresponde cultivar la fe, la voluntad y la certeza de que quien vive con la esperanza y el amor puesto en JESUS, ÉL vendrá y llegará a morar en nuestro corazón abierto y siempre dispuesto para recibirlo a través del decálogo de sus mandamientos.
Uno de estos mandamientos dice: NO MATARÁS, y todos estamos tan seguros de que no hemos matado a nadie ¿verdad? y hasta nos lo creemos directamente en el corazón, ¿cierto?, sin embargo nos equivocamos lamentablemente porque hay muchas maneras de matar, de asesinar, de extinguirse o anularse a sí mismo y sin piedad, veamos:
En épocas navideñas principalmente, parece que de forma recurrente, algunas personas se llenan de nostalgia, de melancolía, de tristeza, de flojera, de soledad y hasta le hacen gala a su tan acostumbrada depresión añeja y patológica, no tienen ganas de nada, todo es cansancio y apatía, aislamiento y malhumor. Reniegan de su suerte porque posiblemente no han obtenido todo lo que hubieran deseado tener o poseer, y tanto se desaniman que no quieren asistir ni siquiera a acompañar a la familia aunque sea un ratito en la noche de navidad.
Y es que la verdad, no hay ánimo para nada, no hay entusiasmo, no hay ilusión, no hay ganas de desvelarse conviviendo con los suyos, platicando, escuchando música, abrazando a los niños abriendo sus regalos y admirando la gran algarabía que en torno a la mesa, se acostumbra disfrutar cada noche de navidad. Y es apenas normal ese estado de ánimo cuando todo el año les ha ido tan mal y de principio a fin, se fue brincando peldaños de decepciones, angustias, carreras, preocupaciones, tristezas, frustración...
Hey, momentito por favor... ¡Pero eso ya se quedó atrás!...
¡ES NOCHE DE NAVIDAD!
¿Que te fue de la patada todo el año?, sí, sí, siii... ¿y qué?, ¿no es acaso mayor bendición que te haya ido tan mal todo el año y tú estés allí, de pié y muy firme, confiada,sana y segura junto a tus seres queridos que te necesitan porque te aman y aunque tú estés allí en ese lugar, con tu carita apagada y tu tristeza abrazada en el alma, ¡Voltea por favor hacia tu alma!, y observa a tu corazón, que quiere envolverse para tí, en un manto sagrado de color blanco y rojo que quiere regalarte como símbolo de pureza y amor que JESUS TE ENVÍA en estos momentos... ¡Acepta su regalo, y regále tú a ÉL... tu propio corazón! mira:
Yo sé que estás triste, que nada te llena el alma, que nada te satisface en este momento,y que en este justo momento crees que tu pena tan grande se quedará para siempre en tu interior, pero eso no es así, todo pasa en esta vida... ¡Todo!, hasta nosotros. Abrázate de los tuyos, respíralos, disfrútalos, tócalos, acércate a ellos, son tu familia y el mayor tesoro de oro que puedes tener hoy, a pesar de tu tristeza, que será pasajera.
Hoy es una noche especial, los coros de ángeles cantarán loores en honor del Señor, festejarán su nacimiento, su llegada a este mundo y cantarán su gloria todos aquellos que son benditos por su gracia divina, tú eres una de esas personas ¿sabes porqué?, pues por eso... precisamente porque estás sufriendo en silencio y Dios está tan cerca del dolor de quien sufre, que su pena la hace suya, Él carga con tu dolor y lo hace suyo para aliviarte y desearte que seas feliz... Tú también entonces debes desear que JESUS sea feliz, muy feliz si quisieras soltar tu dolor.
¡Anda anímate, levántate y sé feliz... ¡aunque sea esta noche! al lado de tu familia, diles cuánto los amas y que son lo más importante para tí en este mundo. ¿No tienes dinero para comprar regalos para todos? MHHH... ¡Eso no importa! mira... Esta noche sorpréndelos, regala fragmentos de tu ser: Una caricia, una sonrisa, una palabra de aliento, un ¡te quiero!, un suspiro, un buen deseo o un beso... ¡Sólo eso! pero que sea de corazón y por favor, no se te olvide repetir conmigo:
¡FELIZ NOCHE, EN ESTA NAVIDAD!
Doral.
Este Divino Niño es Dios, y María su madre, le puso por nombre JESUS, que encarnado aquí en la tierra, trajo bajo su brazo una promesa inmortal para la humanidad: La del amor, el perdón, la esperanza y la vida eterna, y es a nosotros a quien nos corresponde cultivar la fe, la voluntad y la certeza de que quien vive con la esperanza y el amor puesto en JESUS, ÉL vendrá y llegará a morar en nuestro corazón abierto y siempre dispuesto para recibirlo a través del decálogo de sus mandamientos.
Uno de estos mandamientos dice: NO MATARÁS, y todos estamos tan seguros de que no hemos matado a nadie ¿verdad? y hasta nos lo creemos directamente en el corazón, ¿cierto?, sin embargo nos equivocamos lamentablemente porque hay muchas maneras de matar, de asesinar, de extinguirse o anularse a sí mismo y sin piedad, veamos:
En épocas navideñas principalmente, parece que de forma recurrente, algunas personas se llenan de nostalgia, de melancolía, de tristeza, de flojera, de soledad y hasta le hacen gala a su tan acostumbrada depresión añeja y patológica, no tienen ganas de nada, todo es cansancio y apatía, aislamiento y malhumor. Reniegan de su suerte porque posiblemente no han obtenido todo lo que hubieran deseado tener o poseer, y tanto se desaniman que no quieren asistir ni siquiera a acompañar a la familia aunque sea un ratito en la noche de navidad.
Y es que la verdad, no hay ánimo para nada, no hay entusiasmo, no hay ilusión, no hay ganas de desvelarse conviviendo con los suyos, platicando, escuchando música, abrazando a los niños abriendo sus regalos y admirando la gran algarabía que en torno a la mesa, se acostumbra disfrutar cada noche de navidad. Y es apenas normal ese estado de ánimo cuando todo el año les ha ido tan mal y de principio a fin, se fue brincando peldaños de decepciones, angustias, carreras, preocupaciones, tristezas, frustración...
Hey, momentito por favor... ¡Pero eso ya se quedó atrás!...
¡ES NOCHE DE NAVIDAD!
¿Que te fue de la patada todo el año?, sí, sí, siii... ¿y qué?, ¿no es acaso mayor bendición que te haya ido tan mal todo el año y tú estés allí, de pié y muy firme, confiada,sana y segura junto a tus seres queridos que te necesitan porque te aman y aunque tú estés allí en ese lugar, con tu carita apagada y tu tristeza abrazada en el alma, ¡Voltea por favor hacia tu alma!, y observa a tu corazón, que quiere envolverse para tí, en un manto sagrado de color blanco y rojo que quiere regalarte como símbolo de pureza y amor que JESUS TE ENVÍA en estos momentos... ¡Acepta su regalo, y regále tú a ÉL... tu propio corazón! mira:
Yo sé que estás triste, que nada te llena el alma, que nada te satisface en este momento,y que en este justo momento crees que tu pena tan grande se quedará para siempre en tu interior, pero eso no es así, todo pasa en esta vida... ¡Todo!, hasta nosotros. Abrázate de los tuyos, respíralos, disfrútalos, tócalos, acércate a ellos, son tu familia y el mayor tesoro de oro que puedes tener hoy, a pesar de tu tristeza, que será pasajera.
Hoy es una noche especial, los coros de ángeles cantarán loores en honor del Señor, festejarán su nacimiento, su llegada a este mundo y cantarán su gloria todos aquellos que son benditos por su gracia divina, tú eres una de esas personas ¿sabes porqué?, pues por eso... precisamente porque estás sufriendo en silencio y Dios está tan cerca del dolor de quien sufre, que su pena la hace suya, Él carga con tu dolor y lo hace suyo para aliviarte y desearte que seas feliz... Tú también entonces debes desear que JESUS sea feliz, muy feliz si quisieras soltar tu dolor.
¡Anda anímate, levántate y sé feliz... ¡aunque sea esta noche! al lado de tu familia, diles cuánto los amas y que son lo más importante para tí en este mundo. ¿No tienes dinero para comprar regalos para todos? MHHH... ¡Eso no importa! mira... Esta noche sorpréndelos, regala fragmentos de tu ser: Una caricia, una sonrisa, una palabra de aliento, un ¡te quiero!, un suspiro, un buen deseo o un beso... ¡Sólo eso! pero que sea de corazón y por favor, no se te olvide repetir conmigo:
¡FELIZ NOCHE, EN ESTA NAVIDAD!
Doral.
¡¡¡FELIZ NAVIDAD, JUNTO A LOS TUYOS, CON LA COMPAÑIA DEL ESPIRITU DEL SEÑOR!!!
ResponderEliminarSON MIS DESEOS QUE EL PROXIMO AÑO, PUEDAS ALCANZAR "TU UTOPIA".
QUE ESA TAREA QUE EMPRENDISTE YA HACE CASI CUATRO AÑOS, TE DE LAS SATISFACCIONES ANHELADAS.
¡RUEGO TENGAS UN VENTUROSO AÑO 2012!
CON TODO MI AMOR, CARIÑO, APRECIO, ADMIRACION Y RESPECTO.
Patricio Cárdenas H.