¡El verbo es creador, cuida tu lengua!
No pocas son las personas que descuidan sus palabras, que vomitan sus indigestiones de manera mecánica ante los impulsos de la ira, del coraje, de la impotencia, de la rabia, de la traición, de la mentira, de la infidelidad de sus seres amados, de la falta de seriedad de sus amigos, de la indolencia, de la tiranía y de la pasividad de quienes les rodean, y qué triste es tener que convivir con una persona mal hablada, con una persona amargada, grosera, vulgar y soez.
Es muy fácil descargar las emociones negativas frente a la primer persona que se nos atraviesa en el camino, sin siquiera imaginar el delito moral tan grande que significan las sátiras palabras hirientes, y más para quien no las merece. El desbocado nunca piensa lo que va a sacar por su lengua, él las arroja como sierpes venenosas cargadas de odio y malévola intencionalidad, porque su deseo es herir, lastimar, vengarse, arrastrar la mortaja de su miseria interior profunda.
La lengua es una arma tristemente poderosa, de ella se valen los cínicos y los cobardes para llevar dolor a otros, a través de la crítica mordaz que es atrevida, y que a su vez, se vale de miles de artimañas para desfogar sus más criminales instintos.
Es una especie de pulpo con tentáculos receptores de todo lo que puede atraer en su maldad despiadada. ¿Quién se siente tan limpio como para ser capaz de arrojar la primera piedra? Y lo que es peor; a veces ni siquiera es necesario abrir la boca para ensañarse, porque también con una mirada de fuego se mata, con un ademán brusco, con un gesto burlón, con una mímica altanera, prepotente, prosaica y grosera... etc. "Por sus hechos les conoceréis... Dijo El Señor"
La lengua es una arma de doble filo; con ella se puede llevar bendición o se puede causar traición. Por la boca del hombre y la mujer sale todo lo que ella y él llevan dentro. No es tan importante observar lo que entra por la boca, sino lo que sale por ella, ya que el verbo es creador, tan delicado y potente como la misma voz de la palabra escrita.
La lengua es una arma de doble filo; con ella se puede llevar bendición o se puede causar traición. Por la boca del hombre y la mujer sale todo lo que ella y él llevan dentro. No es tan importante observar lo que entra por la boca, sino lo que sale por ella, ya que el verbo es creador, tan delicado y potente como la misma voz de la palabra escrita.
La lengua o lenguaje del corazón, también se puede expresar con hechos, igual que con letras cuando las palabras quieren hablar por si mismas. ¡Qué hermoso es hacer feliz a quien nos lee!, pero más hermoso es escribir lo que no se puede hablar con la boca, es otra forma de creación, no menos valiosa que el verbo proclamado.
Por eso amigas queridas, os invito atentamente a que cuidemos nuestro verbo creador, cuidemos la lengua, lavémonos con agua y jabón si es necesario antes de mancharnos con necedades e intrigas, ¿no basta la pasta y el cepillo dental?, usemos el antiséptico de la misericordia, un lenguaje elevado de amor diario no le cae mal a nadie, y por si esto fuera poco, pongamos una gotitas de canela, esperanza y limón en el paladar antes de dar gracias a Dios, porque nuestra lengua ha crecido sí; pero para sanar las heridas de la humanidad doliente y llevar bendición a sus vidas a través del verbo creador. Eso es todo.
Mis respetos y cariño siempre
Doral.
Buenas tardes mi amiga Doral, uff, que tema amiga mia, es verdad todo lo que expones en tu articulo, hombre o mujer con una lengua de viboras son peligrosos, lo mejor que se puede hacer es alejarse entre mas lejos mejor de ellos, recuerdo que mi madre nos decia, alegense de una lengua de escorpion pues al menor descuido ostraicionaran, una lengua de escorpion puede destruir la vida de una persona son traicioneras pueden levantar falsos testimonio.
ResponderEliminarSon personas malas sin corazon se burla de los demas, son personas muy hirientes difrutan con el dolor de los demas, cuando una lengua de viboras coje a una persona por delante esta no descansara hata verla undida soltando por su lengua injurias de ella.
Yo cuando veo a una persona hablar mal de otras yo me digo esta no es defiar pues mañana puede que hable mal de mi unque no tenga nada malo que decir ya se lo inventara.
Asi que lo mejor que se puede hacer es alejarse y bien lejito de ellas/os.
Bueno Doral amiga mia que tu tema tiene para hablar largo y tendido. Un abrazo y un beso de tu amiga Estrella del Mar.
MUY QUERIDA AMIGA
ResponderEliminarESTRELLA DEL MAR DE INSPIRACIÓN:
Buena observación en tu comentario mi bella querida. Siempre las generaciones anteriores nos van legando cosas y más cosas, pero tambien tradiciones que tienden a la involución del ser humano, mira:
Esto de no tener cuidado con las palabras, es cuestión sociocultural. A ver, dime mi bella, démonos cuenta de que a todos nos enseñan a comer, a lavarnos los dientes, a asearnos nuestro cuerpo, a preocuparnos por nuestra supervivencia, pero dime, ¿Quién se preocupa en el hogar por enseñarnos a alimentar tres veces al día nuestro espíritu?, uff ¿qué digo tres veces al día? ¡Ni siquiera una! y con trabajos y renegando algunas personas van casi a rastras a la misa cada domingo si bién les va.
Pero mija, estamos viviendo los estragos del "modernismo" de un mundo en bancarrota de todos los valores y si no nos preocupamos nosotras mismas por empezar poniendo el ejemplo e instruir a nuestros hijos a cuidar su lenguita, a no hablar mal de nadie, sabiendo que todo lo que hablamos y hacemos en contra de los demás se regresa a buscarnos más las consecuencias, ¿verdad?
En fín mi bella santa, este es un tema bastante complejo, pero digno de profundizarlo, ojalá nuestras amigas lectoras silentes se animen a enviarnos su valiosa opinión que con muchos gusto responderemos a la mayor brevedad posible.
Gracias de todo corazón Lolys querida, muchísimas gracias por estar siempre a mi lado en cada tema. TQM
Doral.