¿Porqué a veces no puedo dormir?

¿Por qué a veces no puedo dormir?

Tantas veces sucede que algunas personas no se explican el porqué el sueño huye como niño travieso de sus vidas. Y por etapas, va marcando la diferencia del buen o mal dormir, pero resulta que las explicaciones que puedan existir para tal efecto, no son de mucha importancia o trascendencia para quienes padecen o padecemos de insomnio, o tal vez solamente de un mal sueño, mal acomodo, o mala postura para dormir o problemas incluso para relajarnos a la hora de tratar de conciliar el sueño.

¡El desvelo es el peor enemigo de la salud!

Por lo tanto es muy común escucharnos los eternos lamentos trasnochados: ¿Qué me pasa, porqué no puedo dormir?, “Ya me di 20 vueltas en la cama y no puedo conciliar el sueño”, “Ya casi amanece y no he dormido nada” etc., y allí sucede un fenómeno curioso: No sólo la persona no duerme, no descansa lo suficiente, sino que encima termina la noche con un desgaste emocional tremendo por tanto pensamiento suelto como si fueran pájaros nocturnos atropellándose en las paredes de la mente, buscando una salida y no la encuentran.

¿Y qué pasa cuando amanece?, pues amanecemos con la luz del día super engorilados porque no pudimos dormir y encima con tamañas ojeras que parecen platillos voladores y un carácter de los mil demonios: “Es el colmo, me tengo que ir a trabajar así”, “No tengo ganas ni de levantarme”, “Me siento de la fregada”, “Me duele la cabeza” y de pilón “Me estoy cayendo de sueño”, y claro… por supuesto que se está cayendo de sueño ¿Pues cómo no? si toda la santa noche se la pasó dando volteretas sobre su amado colchón y el condenado sueño nunca llegó. Quizá por estar demasiado cansado, demasiado preocupado, demasiado tensionado, presionado o por lo que sea, pero el sueño nunca llegó, hasta que amaneció, ¿y ya para qué?

Cuán difícil resulta tener que salir a enfrentar el diario vivir en tales circunstancias, y más cuando sabemos que nada ni nadie podrá resolver nuestros problemas que a veces se complican más de lo normal, debido precisamente a que no tenemos energías, fuerzas ni ánimos para poner buena cara y aplicar la tolerancia en su máximo esplendor. Sales a la calle como sombie con los pies arrastrando y el zumbido en tus oídos, la vista vidriosa, extraviada, que cualquier persona que te observe diría: "Ese o esa se la tronó bien duro" puf; qué ironía tener que decirlo así, pero no hay remedio, tenemos que decirlo así.

Y bueno… es justo reconocer que asociar el trastorno del sueño al estrés sería la mejor causa para encontrar la solución más rápida al problema ¿cierto? Y es por ello los médicos recomiendan dormir bien, lo mejor y más cómodamente que se pueda y el tiempo suficiente para que el organismo recupere sus energías perdidas.

Las personas que no duermen sus ocho horas diarias (recomendadas por el médico), generalmente todo el día andan somnolientas, bostezando y tropezando con todo. La mente se vuelve torpe, no pueden lograr concentrarse con facilidad en sus tareas cotidianas, muestran irritabilidad, sensibilidad extrema, ansiedad o depresión durante los episodios más crudos de sus períodos de insomnio.

Pero hay otros factores que pueden inducir a la vigilia de cualquier persona, nos referimos enfáticamente al exceso de ruido, luz intensa, o porque el consumo de café, alcohol, el exceso de nicotina (tabaco) y otras drogas (como medicamentos o refrescos de cola por ejemplo), hicieron su efecto tóxico y tan nocivo para el organismo humano, o también pudiera ser por la costumbre de las muy famosas pero cortas “siestesitas” que son trocitos de robo al sueño normal de las personas.

Otros factores por los que las personas no duermen puede deberse a desordenes orgánicos como alguna enfermedad, o por apneas que son obstructoras del sueño, la narcolepsia que son los narcóticos de los que hablamos anteriormente, los ronquidos, el enamoramiento, o simplemente el insomnio por problemas afectivos o de carácter económico o social que tantas dificultades o preocupaciones le meten a la mente humana, incluso porque nunca aprendiste a contar borreguitos con los dedos de las manos y terminas haciéndote bolas con la cabeza ¿verdad?

Entonces amiga tú que me lees hoy, piensa, reflexiona, medita; si eres una persona que padece de algún trastorno del sueño y sueles preguntarte con regularidad porqué no puedes dormir, porqué te inquieta tanto la oscuridad sedante de tu cuarto y no te permite descansar, aquí te dejo la respuesta.

Con mis respetos y cariño siempre.
Doral.