¡Las mujeres selectivas!

¡Las mujeres selectivas!

Estamos en pleno Siglo XXI, y la mujer de nuestro mundo, desgraciadamente aún no ha aprendido a tomar decisiones correctas ni provechosas en la mayoría de sus afectos o situaciones de su vida. Siempre, o casi siempre vive tan de prisa que, elegir se convierte en una rutina tan trillada y hasta se atreve a decir: "Bueno, a ver qué pasa, si me equivoco pues ni modo".

Y es que en realidad de verdad, al nacer no traíamos ningún manual sobre cómo vivir la vida, ni cómo tomar decisiones prudentes u oportunas. Cada cual aprende a tomar sus decisiones basado en sus emociones y no en el conocimiento de las cosas... ¡El ser humano vive sujeto a las emociones! las toma como realidad, pero cuando se da cuenta que se equivocó, se siente suspendido entre el cielo y el infierno, llora amargamente su error, culpa al destino de su desgracia, culpa a otros... ¡O culpa a Dios!, no quieren entender que la sociedad en que vivimos está basada en redes de información a través de los avances de la ciencia y la tecnología.

Para la mujer es más fácil tener acceso a lo que siente su corazón. La mujer se ha convertido en una experta ensayista experimental. Algunos señores la llaman: "Mujer frívola o calculadora" y no se trata de frivolidad, ni de ser una mujer que le guste sacar provecho o ventaja de las situaciones, ¡Nó!, se trata de que por naturaleza, la mujer es selectiva y toda una investigadora tenaz.

A la mujer selectiva le gusta experimentarlo todo, corriendo así; el riesgo de equivocarse, de repetir la experiencia, e incluso volverse a equivocar, pero también así aprende que si fué atacada o lastimada por algo o por alguien, deberá tener más cuidado de no tropezarse con la misma piedra, y de esa manera en su cerebro se genera una especie de "Mecanismos de defensa" o intuiciones, que le indican: "Hey, ya no es por allí... busca otro camino"

Entonces cambiar las causas para no tropezar con los mismos efectos, es una labor contínua y repetida de la mujer selectiva, sin embargo; no todas las cosas pueden ser impedidas a tiempo cuando hay reflexión al buscar el cambio. Existen también situaciones imprevistas, en las que la mujer no tiene tiempo de meditar en lo sucedido, tiene que procesar mentalmente de manera inmediata una respuesta y es allí donde echa mano de las emociones de su corazón, anulando su razón y luego se queja de ello: "¿Porqué es tan difícil tomar decisiones?" Es difícil porque lo hace difícil, ¿Pero si lo hace fácil?

Todo se presta para pensar que no aprendemos de lo que no se aprendió en la vida, que estamos perdiendo el tiempo miserablemente, que la mujer y el ser humano en general no está preparado para enfrentar sucesos de tipo aleatorio, es decir: sucesos inesperados, no imaginados, no planeados, y eso complica más la toma de decisiones, y la mujer se confunde más y se vuelve todavía más mentalista, más razonativa, más reflexiva y más pasiva, más insegura al tener que seleccionar algo o a alguien para vincularlo a su vida.

Esta es la razón del porqué muchas mujeres (principalmente de 40 años en adelante), prefieren vivir solas, no tener una pareja estable, o ninguna pareja en sus vidas, aún deseándolo con toda su alma, pero no encuentran a ese "alguien" que llene su perspectiva, ningún hombre reúne el perfil que ella busca, y sufre por ello, se desespera, o en el peor de los casos, aprende a vivir de sueños y quimeras.

Pero como a nadie le gusta pasarse el resto de su vida viviendo sólo de sueños y quimeras, o sólo buscando hechos y explicaciones, la mujer de nuestro mundo seguirá su rumbo firme en la gran búsqueda de su alma gemela, seguirá soñando sí; pero con los pies bien puestos en la tierra y con su corazón en paz, seguirá siendo una mujer selectiva, hasta encontrar a su hombre ideal. ¿Quién dijo, o dónde está escrito que está prohibido?

Con mis respetos y cariño siempre,
Doral.